La Iglesia en Burgos se suma al duelo de Villagonzalo Pedernales

Foto: Burgosconecta.es.
Cerca de doscientas personas se han dado cita este mediodía en la plaza Mayor de Villagonzalo Pedernales en un minuto de silencio convocado por el ayuntamiento de dicha localidad en recuerdo de Pepi, la mujer asesinada ayer por su marido. Entre los presentes se encontraban también el arzobispo, don Fidel Herráez Vegas, y el párroco del municipio, Marcelino Mozo, en un gesto de cercanía ante el dolor por el que atraviesa el pueblo, así como amigos y familiares de la víctima, entre los que también se encuentra su hijo, herido grave y convaleciente en el Hospital Universitario de Burgos.
Junto al arzobispo y al párroco, en el acto han participado la regidora de la localidad, Purificación Ortega; la consejera de Familia e Igualdad de Oportunidades de la Junta de Castilla y León, Isabel Blanco; el delegado territorial de la Junta en Burgos, Baudilio Fernández Mardomingo, y subdelegado del Gobierno, Pedro de la Fuente, así como otras autoridades civiles y militares y numerosos vecinos de la localidad.
María Josefa Santos -Pepi, como la conocían sus amigos y vecinos-, de 55 años de edad, murió ayer de un disparo cometido por su marido, quien también disparó a su hijo, que se encuentra convaleciente en el Hospital Universitario de Burgos, grave pero fuera de peligro. El autor autor del tiroteo se quitó más tarde la vida y así se los encontró la otra hija de la pareja cuando acudió a su vivienda. La policía continúa indagando las razones del suceso, en lo que pudiera ser el segundo caso de violencia machista en la provincia de Burgos en apenas un mes. Otras fuentes, no obstante, apuntan a un posible brote psicótico del homicida. La investigación continúa abierta.